Inmersos en un contexto que nos demanda atención y ocupación por el medio ambiente, sumamos acciones que aportan a la conservación y cuidado de los sectores por donde corremos: arroyos, lagos, bosques y montañas no están exentas de la contaminación, la deforestación y el cambio climático que día a día modifica nuestro entorno.

La Patagonia representa sin dudas uno de los reservorios medioambientales más importantes del planeta, pero su contribución se encuentra también asechada por los mismos factores que afectan la sustentabilidad del resto de las regiones. Solo para referirnos desde la perspectiva demográfica, la atracción que la región genera provoca que por ejemplo en Villa la Angostura, donde anualmente se realiza el K42, prácticamente vio duplicada su población en la última década, creciendo de 7.300 habitantes a mas de 20mil estimados para la actualidad sobre un sistema que no se adapta al mismo ritmo.

En ese lugar, cada año desde 2003, convocamos allí a miles de corredores y turistas que colman su capacidad estimándose en un número superior a 6.000 visitantes. Ese movimiento turístico toma real dimensión desde el punto de vista económico, si se tiene en cuenta que en conjunto movilizan más de 1,6 millones de dólares producto del consumo generado. Pero a su vez presupone una importante huella de carbono la cual nos encontramos desde hace un tiempo empeñados en reducir y compensar.

El evento genera residuos, consume energía y genera impacto no solo en esa semana sino desde su fase de planificación y producción; se fabrican y consumen productos textiles, plásticos, metálicos, impresión con tintas y todo aquellos que puede verse y no. A su vez, los participantes se trasladan en avión, autobuses o automóviles para llegar. Se alojan, se alimentan, incrementan el consumo de energía del lugar y en conjunto generamos un impacto medioambiental sobre el cual continuaremos enfocándonos ahora más intensamente.

4R+C; Reducir, Reciclar, Reutilizar, Recuperar y Concientizar. Una historia con aciertos y errores

A partir de 2003 el K42 no dejó de crecer en cantidad de participantes, en contenido de actividades, en servicios, equipamientos y un sinnúmero de factores que indudablemente dejan su huella. Siempre mantuvimos el enfoque en retirar los residuos del recorrido completamente en corto plazo, pudiendo certificar la ruta limpia en un 90% para el mismo día del evento, y alcanzando el 100% dentro de las 24 horas siguientes. Incluso retirando basura pre existentes a nuestra carrera, somos conscientes de que con esto no basta.

Desde el 2009 hemos puesto mayor énfasis en estas acciones de preservación del medio ambiente. Fue en ese año que lanzamos la campaña “EcologiK”. En 2016, pusimos el foco en concientizar el impacto de los residuos desechados en el circuito con la campaña de difusión “#RecorridoLimpio”. Ya en las últimas ediciones trabajamos en conjunto con diversas organizaciones de Ploggin para asegurar la limpieza post carrera. Los kits de corredor, hace varias ediciones llevan su bolsa reutilizables; como también en 2021, tomamos la decisión de eliminar el empaque plástico de un solo uso que traían las remeras de corredor. Sin embargo, la actualidad nos obliga a poner especial atención en varias de estas prácticas procurando progresivamente:

• REDUCIR los residuos que en conjunto generamos con el evento sin bajar la calidad y la atención a los participantes. Sobre lo que centraremos nuestra atención a partir de 2023.
• Profundizar las prácticas para RECICLAR la mayor parte del material generado. Para esto ya nos encontramos trabajando en conjunto con Villa La Angostura para mejorar e implementar la  separación de residuos en todos los puntos del evento.
• Establecer estrategias para la REUTILIZACIÓN de materiales como una práctica cada vez más activa.
• Y en RECOMPONER el daño que generamos, para lo cual especialmente nos centraremos a partir de este año con el proyecto “Árbol”, que firmaremos el 26 de julio próximo.
• Aprovechar las herramientas de comunicación y convocatoria para vincular a los corredores con la temática ayudará a CONCIENTIZAR cada vez más sobre nuestras prácticas en relación a las herramientas antes enunciadas para cuidar al planeta.

Como cada año, continuaremos en busca de mejorar y sumar acciones a cada punto de las 4R+C, pero somos conscientes que solos no podemos. Esperamos que cada persona que es parte del espíritu k42 nos acompañe, convirtiéndose en un abanderado de la causa, y que cada punto por donde pasamos quede con el menor impacto posible. Que Villa La Angostura siga regalándonos sus mágicos circuitos y que año a año miles de personas puedan seguir disfrutándolo.